Tengo un contrato por horas con un cliente (una pequeña empresa tecnológica, de unas 5 personas + algunos contratistas). Los primeros 7 meses fueron bien: los pagos tendían a retrasarse una o dos semanas en ocasiones, lo que atribuí a la desorganización. Sin embargo, hace un mes las cuentas por cobrar alcanzaron los 25.000 dólares, momento en el que dejé de trabajar para el cliente. Desde entonces, tengo una cadena de correos electrónicos y llamadas telefónicas tratando de solicitar el pago (o el pago parcial) del cliente. Recibo respuestas en un plazo de 1 a 3 días, normalmente con una garantía verbal del cliente de que recibiré al menos un pago parcial en la próxima semana, algo que nunca ha ocurrido.
Ahora estoy pensando en emprender acciones legales (una carta del abogado y luego demandar). El bufete de abogados está dispuesto a renunciar a todas las costas si no recibimos el pago, aunque por supuesto se llevarán un porcentaje decente del pago si ganamos. Todo esto, por supuesto, suponiendo que el cliente pueda pagar (una variable importante en esta ecuación).
Espero que haya una buena regla general para determinar cuándo es mejor iniciar una acción legal. Mis preocupaciones son (1) la pérdida de dinero y (2) que el cliente se vuelva incívico/hostil. Gracias.
p.d. - tenga en cuenta que esto es similar a pregunta 6581 aunque esto se refiere a un pago pendiente mayor (25.000 dólares frente a 100 libras) y, por tanto, a los costes de la acción judicial.