Hace poco fui a una cita con el médico. Al concertar la cita, le dije al médico que sólo iría si mi seguro lo cubría. Fui a la cita y les di la información de mi seguro (de nuevo repitiendo que no continuaría si no estaba cubierto) y me enviaron de vuelta a ver al médico. En pocas palabras, recibí una factura de 700 dólares porque mi seguro no lo cubría. ¿Se les permite hacer esto? Esto es literalmente estafar a la gente por dinero, ya que mis intenciones fueron muy claras.
Respuesta
¿Demasiados anuncios?Sí, es casi seguro que los proveedores están autorizados a hacerlo y no es una estafa
No estoy familiarizado con las leyes específicas de Carolina del Norte, por lo que puede haber otros factores en juego. Pero la cuestión principal es esta:
Los médicos y demás personal clínico no son expertos en su póliza de seguros, ni tienen acceso a ella. No saben, y normalmente no pueden saber, exactamente lo que su seguro cubrirá o no.
De la descripción de los hechos no se desprende claramente que la consulta del médico le asegurara que la visita estaría cubierta, y en mi experiencia los proveedores son bastante cautelosos a la hora de garantizar ese tipo de cosas por la razón expuesta anteriormente: los proveedores no pueden consultar su póliza de seguro. Si intentan facturar y las reclamaciones son rechazadas, entonces usted está en el gancho porque usted recibió los servicios. Un proveedor normalmente puede decirte si está en la red de proveedores de una determinada aseguradora, pero esa suele ser la información más fiable que pueden darte.
Si quiere programar servicios médicos sólo con la condición de que su seguro pague, la carga de determinar quién será responsable de la factura recae sobre usted. La forma de hacerlo sería ponerse en contacto con su aseguradora y preguntar por el servicio concreto (y el proveedor) que desea, y ellos podrán decirle si su póliza lo cubre. Incluso esto no es una garantía, ya que la aseguradora no puede saber cómo facturará el servicio el proveedor y tendrá una capacidad muy limitada para obligarles a facturar de una manera determinada.
Puede que en este caso haya sido un problema o no, pero también es importante tener en cuenta que no es una situación binaria entre "cubierto" y "no cubierto". Dependiendo de los detalles de su póliza, es posible que su seguro cubra un servicio, pero que siga habiendo una parte (hasta el 100%) que usted tenga que pagar. Por ejemplo, si tiene una franquicia que no se ha cubierto, es posible que tenga que pagar toda la visita de su bolsillo aunque, si se hubiera cubierto la franquicia, el seguro habría pagado toda la factura.