El cálculo del ratio PEG tiene dos entradas: El ratio P/E y la tasa de crecimiento. Cada uno de estos datos puede calcularse de diversas maneras. El ratio P/E, por ejemplo, puede utilizar los beneficios finales o los beneficios futuros, etc. Además, los propios beneficios pueden ajustarse de diversas maneras, por ejemplo, excluyendo las ganancias o los costes extraordinarios, etc.
En cuanto a la tasa de crecimiento, ocurre lo mismo: hay muchos datos para elegir y muchas formas de llegar a un resultado. La tasa de crecimiento de su propio cálculo es histórica, utilizando los beneficios por acción del año fiscal más reciente sobre los beneficios por acción del año fiscal anterior. Otra forma de hacerlo con datos históricos sería mirar los 4 trimestres anteriores, sobre los 4 trimestres anteriores. (Esto coincide con la forma en que lo estás haciendo, pero sólo cuando el trimestre más reciente fue el cuarto de una empresa).
Sin embargo, Morningstar indica que están/pueden estar utilizando una tasa de crecimiento futura de consenso. Consulte Morningstar - Ratio PEG :
Ratio PEG
La relación precio/beneficio de una acción dividida por el valor de la empresa BPA proyectado crecimiento. [énfasis mío]
La relación precio/beneficio utilizada en el numerador de este ratio es se calcula tomando el precio actual de la acción y dividiéndolo por la estimación media del estimación del BPA para el año fiscal en curso. Un ratio PEG no significa nada en en sí mismo, por lo que, para comparar, mostramos las medias del sector y del S&P 500.
Lo que no me queda claro es si esa página sólo describe el ratio PEG en general, o si es objetivamente preciso el propio método de cálculo de Morningstar. Yo me inclinaría por lo segundo porque son precisos en cuanto a los datos, pero si quieres confiar en eso, comprueba tú mismo los números de la forma que describen.
En cualquier caso, me gustaría advertir sobre el uso de un solo año de crecimiento de los beneficios. También me gustaría advertir que no se debe utilizar la proyección de futuro de nadie, a menos que se sepa cómo se ha llegado a ella y se esté de acuerdo con la metodología.
Por ejemplo, cuando quiero considerar el ratio PEG de una acción, me gusta calcular una tasa de crecimiento compuesto anualizado de los beneficios de tres a cinco años. Además, si los beneficios de ese periodo son irregulares, no confío mucho en el valor de predicción de la tasa resultante, y me fijo en el mejor año del conjunto para ver si hay elementos especiales que pueda excluir de los beneficios para obtener una tasa de crecimiento más realista (pero menor).