Hoy en día, una empresa suele necesitar tener cuentas en más de una moneda. Los bancos de algunos países ofrecen lo que se llama una cuenta de doble moneda. Se trata esencialmente de dos cuentas con el mismo número de cuenta pero con distinta moneda. Así, uno puede tener un número de cuenta, por ejemplo 123456, y tenerla en AUD y en USD.
Así, el saldo siempre aparecerá como X AUD e Y USD. Si deposita fondos [electrónicos, cheques o efectivo] en USD, su saldo en USD aumenta. Del mismo modo, en el momento de la retirada de fondos tiene que especificar qué moneda está retirando.
Los tipos de interés se calculan en porcentajes diferentes para las distintas monedas.
Así que en pocas palabras sería como operar con 2 cuentas, con la ventaja de recordar sólo un número de cuenta. Designar una moneda determinada como moneda por defecto. Así, si no se indica una divisa junto con el número de cuenta, se tratará como divisa por defecto. De lo contrario, siempre se indicará el número de cuenta y la moneda. Por supuesto, si se combina con otros servicios como el asesoramiento gratuito sobre divisas, etc., la propuesta resulta muy atractiva.
Editar:
Si tienes 100 AUD y 100 USD, si intentas retirar 110 USD, no se permitirá; a menos que también te registres para una conversión de barrido automático. Si usted deposita un cheque en libras esterlinas en la cuenta, por defecto se convertirá en AUD [asumiendo que el AUD es la moneda por defecto].