¿Puede una iglesia pagar por la capacitación en DEA/RCP para los feligreses?

Question

Soy el Tesorero de mi iglesia en Michigan, EE. UU. Estamos comprando un DEA. Nos gustaría que más personas de nuestra congregación estén certificadas en RCP/DEA. ¿Puede la iglesia pagar los ~$60 por persona interesada? Quiero evitar el "beneficio privado".

Creo que la mayoría de las personas interesadas van a pagar por su propia capacitación, por lo que el costo de la capacitación para la iglesia sería mucho menos del 1% de nuestro presupuesto, no parece una cantidad "significativa". Además, tampoco parece fuera de lugar que la iglesia gaste dinero en mejorar los resultados para posibles futuras víctimas de emergencias de salud en nuestras instalaciones. Entonces mi inclinación es que está bien. Pero estoy verificando. ¡Gracias!

Answer 1

Si hay un beneficio claro para la iglesia de tener más personas capacitadas en RCP / DEA, entonces el gasto parecería estar justificado. Sin embargo, creo que el caso se fortalecería si el gasto se dirigiera a donde se necesitaba. Por ejemplo, si el 100% de tu congregación recibiera la capacitación, eso claramente sería excesivo. No ofrece ninguna mejora real sobre tener al 50% capacitado.

Mi recomendación sería averiguar cuántas personas necesitas capacitar, y dónde y qué tipo de personas: cuántas personas en los servicios dominicales, cuántas en los ministerios de niños, en los ministerios de ancianos. Luego ofrece la capacitación a las personas que sabes que estarán allí, por ejemplo, los ujieres o voluntarios. Esto también garantiza que capacites a personas que estarán mayormente presentes. No tiene sentido capacitar a un miembro aleatorio de la congregación que solo aparece unas pocas veces al año: o capacitar a 100 personas pero ninguna que esté presente en eventos de ancianos.

Esto asegura que el gasto sea claramente para el beneficio de la iglesia (evitando problemas con el recaudador de impuestos); evita que las personas utilicen la iglesia solo para obtener una certificación que les beneficia (evitando problemas de beneficio privado); y también asegura que la iglesia obtenga el más alto nivel de seguridad por su gasto.