Tomemos como ejemplo la India. India ha ido perdiendo la mayoría de sus mentes brillantes en favor de Occidente. Además, India ocupa un lugar bajo en cuanto a desarrollo. Me gustaría obtener una respuesta definitiva a esta pregunta de tipo causa-efecto.
Si la India hubiera garantizado de algún modo que sus personas con talento no pudieran abandonar el país o si la India hubiera impedido que sus mentes brillantes y ambiciosas se dejaran seducir por Occidente, ¿se habrían visto esas mentes brillantes obligadas a idear cómo mejorar las infraestructuras de la India, lo que habría dado lugar al desarrollo del país?
¿O es al revés, es decir, el desarrollo de una nación se decide principalmente (>80%) por la calidad de su liderazgo político? La calidad de la política india ha sido realmente mala desde 1947. Esto no es un juicio, sino un simple hecho. Entonces, ¿es que incluso si hubiéramos conservado a los más brillantes no habrían supuesto ninguna diferencia para el futuro de India?
¿Podría dar una respuesta con datos y estadísticas? También puede dar argumentos intuitivos para respaldarla.
Mi tesis es que la política de una nación decide el destino económico de la misma, no su reserva de talento porque el talento puede ser formado por el gobierno de turno cuando quiera. En la India, la gente no tiene talento porque haya nacido así, sino porque la competencia obliga a ello en una sociedad superpoblada. Así que mi afirmación es que el hecho de que los indios hayan tenido tanto éxito en Estados Unidos, donde ocupan puestos clave en la elaboración de políticas, no debería ser motivo de alarma. Si hubieran estado también en la India, no habrían podido marcar ninguna diferencia. Y siempre que la política de la nación mejore, la nación creará cualquier cantidad de talento que necesite al igual que los monos pueden ser entrenados en cualquier momento para actuar en un circo.
¿Está equivocada mi tesis? Oigo opiniones fuertes de ambos lados y no puedo decidir qué lado seguir. Por favor, no se limiten a dar respuestas/opiniones subjetivas (¡yo sé que lo he hecho!). Aporten algo de rigor y hechos.