Pongo el ejemplo de Suecia, cuyo impuesto sobre el carbono está muy bien considerado y es el más alto de Europa. Fuente
Suecia tiene un impuesto sobre el carbono de 110 euros/t. Fuente
Este impuesto no se aplica a las instalaciones cubiertas por el RCCDE. El RCCDE se aplica al 45% de todo el carbono emitido en la UE y actualmente sólo fija el precio del carbono en unos 25 euros/t. Fuente1 Fuente2
Además, alrededor del 45% de la energía primaria que se consume en Suecia es nuclear e hidráulica, lo que hace que el suministro energético sueco sea relativamente menos dependiente de las emisiones de carbono. Fuente
Como consecuencia del impuesto sobre el carbono y de la elevada cuota de generación de energía no fósil, las emisiones de carbono per cápita de Suecia son bajas en comparación con los estándares internacionales (5,5 t de CO2e / cápita / año). Fuente
Sin embargo, si se mide por el consumo, las emisiones per cápita de Suecia son relativamente altas (15,4 t de CO2e / cápita / año). El 58% del carbono consumido en Suecia es importado. Fuente
Esto me hace pensar que podría haber una tendencia a que las costosas emisiones de carbono nacionales, especialmente las que no están cubiertas por el más barato ETS de la UE, sean sustituidas por el carbono incrustado en las importaciones - a menos que el impuesto sobre el carbono se aplique también a las importaciones.