Las pérdidas y ganancias de un ADR/GDR proceden de las variaciones del precio de las acciones subyacentes denominadas en moneda local y de las variaciones del tipo de cambio. Se netea por divisa el delta de tipo de cambio de todas las posiciones en ADR (largas, cortas, opciones...), y si excede su apetito, entonces el instrumento más sencillo para cubrirlo es un forward de tipo de cambio - generalmente, entrega física para mercados desarrollados, pero sin entrega (NDF) para algunas divisas de mercados emergentes. Siempre que el vencimiento del contrato a plazo no sea superior a unos meses, las pérdidas y ganancias derivadas del tipo de interés de la divisa son irrelevantes, y lo único que se obtiene es una cobertura delta de divisas. A medida que se acerca la fecha de vencimiento de un contrato a plazo con entrega física o la fecha de determinación del NDF, la delta de divisas desaparece, por lo que es necesario renovarla, es decir, sustituirla por un nuevo contrato a plazo.
El mayor problema práctico es que la delta de divisas de los ADR cambiará siempre que varíe el precio de la acción subyacente. Dependiendo de lo poco que desee mantener la delta de divisas, es posible que tenga que volver a cubrirla a menudo. Es un poco más fácil, aunque no obligatorio, añadir nuevos contratos a plazo con el mismo vencimiento que algún contrato a plazo existente, de modo que tenga menos vencimientos que recordar para volver a cubrir.
Dependiendo de las divisas, puede considerar la posibilidad de utilizar algunos futuros sobre divisas además de los contratos a plazo.
Dependiendo de las divisas, en lugar de cubrir la delta, es posible que prefiera utilizar opciones de divisas fuera de dinero para cubrir sólo un movimiento muy adverso del tipo de cambio y mantener el resto de la exposición a las divisas.